Pardilla y Moraleda, José


JOSÉ PARDILLA Y MORALEDA

Coadjutor de Manzanares
José Pardilla y Moraleda nació el 10 de julio del año 1878 en Membrilla (Ciudad Real) y fue bautizado en ésta a los pocos días, el 12 de este mismo mes. Hijo de Antonio y Javiera. Inició los estudios eclesiásticos en el Colegio de Orihuela y pasó después al Seminario de Ciudad Real donde concluyó los estudios, fue ordenado de Presbítero y en su pueblo natal celebró la primera Misa el día el 29 de septiembre de 1907. Desde su infancia se caracterizó siempre por la ingenuidad más sencilla y la jovialidad más cordial y festiva, aunque con su madurez el dolor y los sufrimientos fijaron en él con frecuencia una mirada dura. Después de asistir a la muerte de varios hermanos tuvo que presidir en un mismo día el doble entierro de su padre y de su madre. La vida le trató con dureza.

Ordenado de Presbítero su primer encargo fue en Valverde (Ciudad Real), sustituyendo a don Aníbal Carranza mientras cursó en Toledo los dos años del doctorado. En abril de 1910 fue nombrado Coadjutor de Chillón (Ciudad Real). Después llega de Coadjutor a Manzanares donde pasó más de veinte años hasta su trágica muerte. Buen compañero y buen amigo, con una jovial campechanía para todos, fue a la vez edificante sacerdote, trabajador y celoso, y sobre todo, asiduo administrador del Sacramento de la Penitencia, era muy buscado en el confesionario para recibir este sacramento. El martirio fue desolador. Sacado de la casa el 9 de agosto de 1936 en pleno día y en el camino hacia la cárcel se cebaron de tal suerte en él con castigos, golpes y disparos que cayó gravemente herido antes de llegar a la prisión, quedando agónico, sobre la dura calzada donde pasó largo rato abandonado completamente, exhalando ayes e invocando la asistencia de la Virgen del Espino, Patrona de Membrilla, hasta dar el último suspiro y fallecer en el denominado “Sitio La Candelaria”. Su única hermana murió bien pronto, víctima a la vez de la amargura, del desamparo y de falta de recursos económicos.