Pérez De Celis, Padre José
PADRE JOSÉ PÉREZ DE CELIS, O.S.A.
O.S.A.
El P. José Pérez de Celis nació el 15 de marzo del año 1860 en el pueblo de Cantoral, municipio de Castrejón, en la provincia y diócesis de Palencia. Fue bautizado en la parroquia de la localidad, cuyo nombre no figura en la partida, el el 19 del mismo mes y año. Fueron sus padres José Pérez de la Hera, natural de Cantoral de la Peña y Fausta de Celis Vega, oriunda de Cubillo de Castrejón. José fue el segundo hijo de este humilde y cristiano matrimonio que educó a sus cuatro hijos en la fe y piedad cristiana. Poco sabemos de los primeros años de su vida en los que, con toda seguridad, acudiría a la escuela de la localidad para aprender las primeras letras y que luego, en alguna de las preceptorías de los pueblos vecinos, recibiría la instrucción humanística y de la lengua latina para seguir después la llamada al sacerdocio. Ingresó en el Convento que los Agustinos tienen en Valladolid a los 18 años de edad, donde hizo el año de prueba o noviciado. Tomó el hábito el día 7 de septiembre de 1878. Transcurrido con éxito y sin grandes dificultades esta iniciación, profesó de votos simples en la misma ciudad el 8 de septiembre de 1879. En este mismo monasterio los estudios de filosofía para trasladarse luego al convento de Santa María de La Vid (Burgos) para cursar y adquirir los conocimientos necesarios de teología, derecho y moral. Aquí hizo la profesión solemne el día 12 de septiembre de 1882. A continuación fue recibiendo las diversas órdenes sagradas para llegar al sacerdocio el 7 de junio de 1884.
Dos años después de ser ordenado sacerdote fue enviado al archipiélago filipino donde ejerció con piedad y entusiasmo su ministerio en diversos lugares. Su primer destino fue Ylocos, donde consiguió el conocimiento más que suficiente del idioma de los nativos. Sirvió luego en los pueblos de Bangui y Napartián en 1887. Fue conventual de Guadalupe en 1892, sacristán en 1895 y por segunda vez conventual del mismo y de Manila en 1898. Al terminar la dominación española de aquellas islas y después de no pocos trabajos y sufrimientos en algunas cárceles, regresó a España en marzo de 1900.
De nuevo en España residió primero en Valladolid y durante dos años, de 1903 a 1905, en Pavía (Italia). Su destino siguiente fue en la República Argentina donde ejerció el apostolado dos años. Volvió enfermo a la Patria y estuvo, sucesivamente, en la casa enfermería de Gracia, en Barcelona, en La Vid y en Valladolid. En 1930 es conventual de la casa de Gijón. Pasó luego a la enfermería de Caudete (Albacete), su última residencia.
Desempeñó con esmero el ministerio sacerdotal. Fue amante del estudio y de la pluma como escritor. Suya es casi toda la hagiografía agustiniana de la obra del Señor Calpena: "La Luz de la Fe en el siglo XX". Fue también colaborador de la revista agustiniana España y América.
El día 23 de julio fue apresado sin oponer resistencia alguna. Permaneció en la cárcel de la localidad hasta el día 5 de agosto, fecha en la que fue conducido juntamente con otros 10 hermanos de hábito al lugar de Partida de Madariaga, término de Fuente la Higuera, en los límites de la provincias de Albacete, Alicante y Valencia, pero perteneciente a esta última, donde fue vilmente asesinado por odio a la fe. Solo por ser sacerdote y religioso. Tenía a la sazón, 76 años. Sus 10 hermanos de hábito desde el 28 de octubre de 2007 están ya beatificados. Los testigos que dieron testimonio de aquella muerte violenta afirman que fueron 11 los asesinados. También la muerte del P. José si bien no es suficiente para ser mártir, sí lo es y que fue por quién dio su vida: por ser sacerdote de Cristo.
Dos años después de ser ordenado sacerdote fue enviado al archipiélago filipino donde ejerció con piedad y entusiasmo su ministerio en diversos lugares. Su primer destino fue Ylocos, donde consiguió el conocimiento más que suficiente del idioma de los nativos. Sirvió luego en los pueblos de Bangui y Napartián en 1887. Fue conventual de Guadalupe en 1892, sacristán en 1895 y por segunda vez conventual del mismo y de Manila en 1898. Al terminar la dominación española de aquellas islas y después de no pocos trabajos y sufrimientos en algunas cárceles, regresó a España en marzo de 1900.
De nuevo en España residió primero en Valladolid y durante dos años, de 1903 a 1905, en Pavía (Italia). Su destino siguiente fue en la República Argentina donde ejerció el apostolado dos años. Volvió enfermo a la Patria y estuvo, sucesivamente, en la casa enfermería de Gracia, en Barcelona, en La Vid y en Valladolid. En 1930 es conventual de la casa de Gijón. Pasó luego a la enfermería de Caudete (Albacete), su última residencia.
Desempeñó con esmero el ministerio sacerdotal. Fue amante del estudio y de la pluma como escritor. Suya es casi toda la hagiografía agustiniana de la obra del Señor Calpena: "La Luz de la Fe en el siglo XX". Fue también colaborador de la revista agustiniana España y América.
El día 23 de julio fue apresado sin oponer resistencia alguna. Permaneció en la cárcel de la localidad hasta el día 5 de agosto, fecha en la que fue conducido juntamente con otros 10 hermanos de hábito al lugar de Partida de Madariaga, término de Fuente la Higuera, en los límites de la provincias de Albacete, Alicante y Valencia, pero perteneciente a esta última, donde fue vilmente asesinado por odio a la fe. Solo por ser sacerdote y religioso. Tenía a la sazón, 76 años. Sus 10 hermanos de hábito desde el 28 de octubre de 2007 están ya beatificados. Los testigos que dieron testimonio de aquella muerte violenta afirman que fueron 11 los asesinados. También la muerte del P. José si bien no es suficiente para ser mártir, sí lo es y que fue por quién dio su vida: por ser sacerdote de Cristo.