Sánchez Carrillo, Juan
JUAN SÁNCHEZ CARRILLO
Párroco de Belmontejo
Nació, en Cervera del Llano, Cuenca, el 22 de octubre de 1874. Estudió en el Seminario Conciliar de San Julián. Al terminar los estudios el año 1897, fue ordenado sacerdote, siendo destinado a Villar de la Encina. Después desarrolló la misión sacerdotal en los siguientes lugares: En el año 1902, en Fresneda de Altarejos; en 1903, Ecónomo de Albaladejo del Cuende; en 1904, en Montiel, Ciudad Real; en 1909, Párroco de Abia de la Obispalía y en 1907, Párroco de Belmontejo, donde le sorprendió la persecución religiosa. Fue un sacerdote celoso y obediente, trabajador y fiel cumplidor de su deber. Siempre estuvo con los feligreses que, en cada momento, tenía a su cargo.
Cuando la persecución religiosa ya era general y muy virulenta, en Belmontejo, su parroquia, fue perseguido cruelmente y ultrajado sin piedad, superando todo dolor moral y físico con gran entereza, dando ejemplo y testificando su fe católica, como sacerdote fiel y valiente. Antes de morir, perdonó a sus asesinos y, alabando a Dios y diciendo ¡Viva Cristo Rey!, cayó al suelo, muerto por las balas. Después, profanaron su cadáver, “convirtiendo el macabro espectáculo en un acto de burla y diversión”, como dijo unos de los testigos oculares ya fallecido. Murió asesinado en el término de San Lorenzo de la Parrilla, el día 27 de septiembre de 1936, por ser sacerdote y por odio a la fe católica.
Cuando la persecución religiosa ya era general y muy virulenta, en Belmontejo, su parroquia, fue perseguido cruelmente y ultrajado sin piedad, superando todo dolor moral y físico con gran entereza, dando ejemplo y testificando su fe católica, como sacerdote fiel y valiente. Antes de morir, perdonó a sus asesinos y, alabando a Dios y diciendo ¡Viva Cristo Rey!, cayó al suelo, muerto por las balas. Después, profanaron su cadáver, “convirtiendo el macabro espectáculo en un acto de burla y diversión”, como dijo unos de los testigos oculares ya fallecido. Murió asesinado en el término de San Lorenzo de la Parrilla, el día 27 de septiembre de 1936, por ser sacerdote y por odio a la fe católica.