Aparicio Fernández, José
JOSÉ APARICIO FERNÁNDEZ
Regente de Torrejoncillo del Reyo
Nació el día 19 de marzo de 1908, en Mazarulleque, Cuenca.Estudió en el Seminario de Cuenca y de Toledo, recibiendo el Orden Sacerdotal el año 1930.Fue nombrado Coadjutor de El Provencio el año 1932 y, poco después, Cura Ecónomo de Belmonte, pasando, en 1934, a Regente deTorrejoncillo del Rey, Cuenca.
Cuando arreció la persecución religiosa, buscó refugio en su pueblo, en casa de sus padres. Pero pronto comenzaron los malos tratos y los milicianos de Torrejoncillo fueron a buscarlo, con perversas intenciones, engañando a la madre, diciéndole que habían ido a buscarlo para acompañarlo a Cuenca a hacer unas diligencias. Su madre les preparó una buena cena (para los milicianos, creyendo buenas sus intenciones) ya que dijeron que no se entretendrían en Cuenca y que volverían enseguida.
La madre esperó con la cena, y estos no volvieron. A los dos días se enteró de que habían asesinado a su hijo, en el término de Álcázar del Rey, con ensañamiento y mutilación de su cuerpo antes de morir. Tan impresionada quedó la madre que, al poco tiempo, la madre murió de dolor por la muerte de su hijo. Murió asesinado en el término de Alcázar del Rey (Cuenca) en 1936. La única causa de su muerte fue su carácter sacerdotal y el odio a la fe católica de los asesinos. Desde que murió se le concedió la fama de mártir.
Cuando arreció la persecución religiosa, buscó refugio en su pueblo, en casa de sus padres. Pero pronto comenzaron los malos tratos y los milicianos de Torrejoncillo fueron a buscarlo, con perversas intenciones, engañando a la madre, diciéndole que habían ido a buscarlo para acompañarlo a Cuenca a hacer unas diligencias. Su madre les preparó una buena cena (para los milicianos, creyendo buenas sus intenciones) ya que dijeron que no se entretendrían en Cuenca y que volverían enseguida.
La madre esperó con la cena, y estos no volvieron. A los dos días se enteró de que habían asesinado a su hijo, en el término de Álcázar del Rey, con ensañamiento y mutilación de su cuerpo antes de morir. Tan impresionada quedó la madre que, al poco tiempo, la madre murió de dolor por la muerte de su hijo. Murió asesinado en el término de Alcázar del Rey (Cuenca) en 1936. La única causa de su muerte fue su carácter sacerdotal y el odio a la fe católica de los asesinos. Desde que murió se le concedió la fama de mártir.